Tratamientos corporales

La hidrolipoclasia conocida como liposucción sin cirugía es un tratamiento indicado para reducir la celulitis y grasa localizada, así como para moldear distintas zonas del cuerpo, principalmente cintura, abdomen, muslos, brazos... Hay que tener en cuenta que esta técnica está destinada a perder grasa y volumen, pero no a la pérdida de peso.

Las ventajas de la hidrolipoclasia son visibles desde la primera sesión. El objetivo principal de este tratamiento es la eliminación de grasa, como si fuera una liposucción pero sin pasar por el quirófano. Se puede reducir de 1 a 2 cm por sesión, siempre que se siga una dieta baja en grasas y sin tomar alcohol. Además, es más económica que una liposucción tradicional, siendo también muy efectiva, ya que al romper la célula grasa, no podrá albergar más grasa en su interior.

La criolipólisis es un tratamiento de estética que tiene un claro objetivo: eliminar la grasa localizada de forma definitiva. Esta es una de las grandes preocupaciones de muchas personas que quieren esculpir su cuerpo, definir su figura y eliminar la acumulación de la grasa. Y es que, por mucho que realicemos dieta y ejercicio, muchas veces es complicado conseguir el cuerpo que realmente deseamos porque hay un tipo de grasa que se queda acumulada en una zona y es muy difícil de eliminar.

Para ello, nada mejor que apostar por métodos como la criolipólisis, un tratamiento muy eficaz que te permitirá redefinir tu figura sin necesidad de padecer dolor ni de pasar por un quirófano. Los beneficios de la criolipólisis son muchos, pero los más destacado son los siguientes:

• Elimina la grasa del cuerpo.
• Es un tratamiento no invasivo e indoloro.
• Los resultados son permanentes.
• El proceso es 100% natural.
• Es una técnica muy segura que respeta las necesidades del cuerpo y de la piel.

Pero, ¿cómo funciona la criolipolisis? El método es muy sencillo: es una terapia que aplica frío de forma controlada para destruir los adipocitos al reducir su temperatura. Con el frío, se consigue descomponer estas células de grasa y que estas se eliminen del cuerpo de manera completamente natural. Para ello, se emplea un tratamiento con una temperatura inferior a los 0 grados que congela la grasa y la destruye.

Es un tratamiento que está indicado para las personas con acumulación de grasa en el cuerpo, pero que no padecen obesidad ni sobrepeso excesivo. Es importante detallar que este método consigue eliminar la grasa en cantidades pequeñas, por lo que los resultados no son inmediatos, sino que se necesitan unas semanas para empezar a ver los efectos en el cuerpo.

La lipolisis biológica no invasiva es una técnica novedosa para eliminar grasa localizada como respuesta a la necesidad constante de los pacientes con depósitos grasos persistentes que no respondían a la dieta y al ejercicio. Esta técnica supone normalmente la inyección de principios activos seguros en el interior de los depósitos grasos localizados en el tejido subcutáneo. Aunque esta técnica fue utilizada al principio para inyectar medicación en el interior de la capa subcutánea de la piel para tratar trastornos vasculares y linfáticos, recientemente se ha aplicado para la lipólisis no quirúrgica

La Radiofrecuencia o Diatermia está con nosotros desde hace 75 años. En medicina es conocida en el ámbito quirúrgico para la coagulación de tejidos y eliminación de tumores. En estética es el tratamiento más empleado para la reafirmación de la piel y reducción de volumen corporal.

Para fines estéticos la radiofrecuencia emplea un nivel de energía no ablativo, es decir, es un tratamiento no invasivo que no corta la piel y no genera cicatrices, el paciente solo siente un ligero calor que convierte su sesión en un momento relajante.

Este tipo de RadioFrecuencia No Ablativa (RFNA) fue certificada en 2002 como técnica eficaz para estiramiento cutáneo no quirúrgico. La certificación vino de la mano de la Agencia Americana del Medicamento (FDA), un laboratorio médico de prestigio internacional que la impulsó definitivamente.

Toda máquina de radiofrecuencia tiene un manípulo que se aplica sobre la piel, pero solo las más modernas son del tipo capacitivo, generando calor interno en la dermis y calentándose la epidermis desde dentro y no desde fuera, como así hacían las primeras generaciones de radiofrecuencia resistiva. El calentamiento profundo genera efectos en 2 zonas, el tejido graso subcutáneo y la piel.

Técnicamente, la radiofrecuencia genera ondas electromagnéticas y éstas un rápido movimiento rotacional de las moléculas de agua del tejido graso que por fricción se calienta. La mayor o menor temperatura conseguida depende de la cantidad de agua del tejido tratado y en general, cuanto mayor sea mejores serán los resultados.